El cierre de un grupo de medios de comunicación masiva significa un severo golpe para el país, no solo por el despido de todos sus colaboradores, si no que también se pierde una alternativa mas en la prensa, en la radio y en la televisión nacional.
Casos tan graves como los de Grupo Extra merecen un espacio en la agenda nacional ya que el cierre de canales y emisoras independientes se dan casi siempre por la posible concentración de medios en pocas manos, en donde una empresa puede controlar hasta 5 canales y 10 emisoras, lo cual podría afectar el desempeño y el futuro de otros medios alternativos, poniendo en peligro la democracia de un país.
Además, no sabemos que pasará con las frecuencias 780 AM y Canal 42, lo más probable es que ambas frecuencias vayan a ser devueltas al Estado Costarricense, pues el espectro radioeléctrico es un bien del procomún, es decir, un bien de dominio público del Estado Costarricense. Vamos a ver que dictamina al respecto el Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones.
Nos solidarizamos con las familias de los trabajadores del Grupo Extra que se han visto afectados por esta difícil situación y les deseamos éxitos en sus futuros proyectos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario